Ciencias de la Educación
Artículo de Investigación
Fundamentación del proceso enseñanza – aprendizaje para la formación de valores en Educación Cultural y Artística
Foundation of the teaching-learning process for the formation of values in Cultural and Artistic Education
Fundamento do processo ensino-aprendizagem para a formação de valores na Educação Cultural e Artística
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Correspondencia: daniela.valencia@educacion.gob.ec
*Recibido: 29 de abril del 2022 *Aceptado: 30 de mayo de 2022 * Publicado: 21 de junio de 2022
I. Licenciada en Contabilidad y Auditoría (Contador Público autorizado), Magíster en Educación, Docente de la Unidad Educativa Oscar Efrén Reyes, Baños de Agua Santa, Ecuador.
II. Licenciada en Educación, mención Lengua y Literatura, Especialista en Filología e Investigación, Doctora en Ciencias Pedagógicas, Profesora Asociada a Dedicación Exclusiva, Universidad Nacional Experimental, “Francisco de Miranda.”, Venezuela.
III. Técnico-Tecnológico Superior, Profesor de Educación primaria - nivel Tecnológico, Licenciado en Ciencias de la Educación mención Educación Básica, Magister en Diseño Curricular y Evaluación Educativa, Docente de la Unidad Educativa Dr. Misael Acosta Solís, Baños de Agua Santa, Ecuador.
Resumen
La formación en valores puede dinamizarse a través de las asignaturas, en especial aquellas que promueven las emociones y la creatividad; en ese orden de ideas, se plantea como objetivo del presente estudio, generar una Aproximación teórica del proceso de enseñanza – aprendizaje para la formación de valores en la asignatura de educación cultural y artística. Para desarrollar la investigación, se hizo uso del método bibliográfico, modalidad documental, recabando información de diversos trabajos de investigación publicados en revistas científicas y siendo analizados a través de la lectura, toma de apuntes e identificación de los aspectos de interés. Se concluyó que el proceso de enseñanza y aprendizaje que se fundamente en la promoción de los valores mediante las artes y la cultura perfecciona al individuo, alienta la imaginación y la innovación y ofrece experiencias únicas que se mantienen en el tiempo.
Palabras claves: Proceso de enseñanza – aprendizaje; formación de valores; asignatura de educación cultural y artística.
Abstract
Training in values can be made more dynamic through the subjects, especially those that promote emotions and creativity; In that order of ideas, the objective of this study is to generate a theoretical approach to the teaching-learning process for the formation of values in the subject of cultural and artistic education. To develop the research, the bibliographic method, documentary modality, was used, gathering information from various research works published in scientific journals and being analyzed through reading, taking notes and identifying aspects of interest. It was concluded that the teaching and learning process based on the promotion of values through the arts and culture perfects the individual, encourages imagination and innovation, and offers unique experiences that are maintained over time.
Keywords: Teaching-learning process; formation of values; subject of cultural and artistic education.
Resumo
A formação em valores pode ser energizada através das disciplinas, principalmente aquelas que promovem emoções e criatividade; Nessa ordem de ideias, o objetivo deste estudo é gerar uma abordagem teórica do processo ensino-aprendizagem para a formação de valores na disciplina de educação cultural e artística. Para desenvolver a pesquisa, utilizou-se o método bibliográfico, modalidade documental, reunindo informações de diversos trabalhos de pesquisa publicados em periódicos científicos e sendo analisados por meio de leitura, anotações e identificação de aspectos de interesse. Concluiu-se que o processo de ensino e aprendizagem baseado na promoção de valores por meio das artes e da cultura aperfeiçoa o indivíduo, estimula a imaginação e a inovação, e oferece experiências únicas que se mantêm ao longo do tempo.
Palavras-chave: Processo ensino-aprendizagem; formação de valores; disciplina de educação cultural e artística.
Introducción
Dentro del contexto educativo, lo valores representan un aporte al sujeto en formación para la asunción de los principios éticos y morales que regirán el comportamiento de los ciudadanos que requiere un país; lo cual debe lograrse a través de un aprendizaje flexible, creativo, comunicativo y de apoyo emocional, académico y espiritual del docente hacia el estudiante, de manera que éstos puedan expresar sus potencialidades creativas y habilidades comunicativas con métodos pedagógicos que coadyuven al desarrollo social. (Organización de la Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO, 2000).
Desde la experiencia Latinoamérica, básicamente soportada por años de práctica con gratos resultados, educadores del arte como Jesualdo (Pedagogía de la Expresión), Luis F. Iglesias (Didáctica de la Libre Expresión) y las hermanas Cossetini, han descrito en sus textos cómo los niños aprenden la realidad en la vida misma, favoreciendo la libertad de expresión, la sensibilización y la emoción por descubrir lo particular de cada uno a partir de su interacción social.
Asimismo, en países como México, por ejemplo, la aprobación de la legislación educativa supuso un cambio importante en la concepción de la enseñanza frente al planteamiento tradicional, que centraba toda la articulación del currículo en torno al aprendizaje conceptual y desde la reforma de la legislación se impulsó un modelo en el que los contenidos de la enseñanza se debía organizar en tres dimensiones: conceptos, procedimientos y actitudes (bajo este término se incluyeron las normas y los valores), para integrar todas las áreas curriculares con temas transversales relacionados con la educación en valores.(Corral, (2005).
En ese marco de acción, el plan de estudios de Ecuador actualmente tiene un nuevo enfoque, que enfatiza la formación integral del ser humano, garantizando el aprendizaje desde temprana edad y esto se construye en torno a tres dimensiones: personal y afectivo-emocional (el yo: identidad); social y relacional (el encuentro con el otro: alteridad); y simbólicos e intelectuales (el entorno: espacio, tiempo y objetos), que estructuran los procesos de aprendizaje de las artes visuales, la música y la expresión corporal. (MINEDUC, LOEI, 2017).
Por consiguiente, la carga de trabajo establecida para desarrollar el programa de Educación Cultural y Artística en las distintas instituciones educativas del país contribuirá de manera decisiva a la formación de los estudiantes en temas de expresión, apreciación y experimentación artística. Para el desarrollo de este campo, es necesario que la implementación del documento curricular presentado cuente con la colaboración de docentes expertos (docentes de música y plásticos) en aras de planificar proyectos interdisciplinarios que produzcan aprendizajes más significativos, promoviendo un mayor contacto cercano con el arte en sus diversas manifestaciones con el fin de optimizar la enseñanza de esta disciplina desde un enfoque puramente contemporáneo. (Hidalgo, 2018).
Lo mencionado con anterioridad, se desprende de la necesidad de que la escuela sea un agente de formación de los valores, pero desde la práctica para hacerlo efectivo, en virtud de que la actual sociedad atraviesa una crisis de valores morales a nivel mundial evidenciada mediante actitudes negativas en el orden social. (Santos, et al 2021).
Por tal razón, la Educación está en la obligación de velar por el desarrollo humano integral de los educandos y se considera que por medio de las prácticas artísticas este fin se puede alcanzar, teniéndolas como espacios de intercambio de saberes y experiencias, así como de interacción con los otros; valorando y reconociendo la diversidad en todos sus campos y aportando elementos para la reconstrucción de las identidades de los estudiantes, que se encuentran en situación de vulnerabilidad debido las realidades que viven a diario en los diferentes contextos. (Jiménez, 2014).
Cabe destacar, que la educación en valores es expresión de la inquietud del sistema educativo por cuestiones sociales. Su objetivo es capacitar a los futuros ciudadanos para participar activamente en una sociedad compleja, fundamentada en principios democráticos y participativos: Sin olvidar lo moral, a fin de generar actitudes y hábitos individuales y colectivos, con el objetivo de desarrollar aptitudes, para preservar en su esencia, adaptándonos a las situaciones emergentes, los valores con los que las personas se identifican individual y colectivamente.
De esta manera, debe darse igual relevancia a asignaturas como las que comprenden el área de educación artística y la cultura, las cuales permiten a los estudiantes la de posibilidad de poder demostrar y expresar sus habilidades ya sea en la danza, música, teatro, pintura y dibujo. Para lograrlo, los docentes deben realizar una innovación en sus prácticas pedagógicas dando a conocer diferentes actividades que hacen de esta área del conocimiento una de las mejores alternativas para interrelacionar las demás; haciendo que ésta sea transversal y contribuya a tener una educación que responda a las necesidades y requerimientos de los estudiantes.
Derivado de lo expuesto, se considera que la formación en valores puede dinamizarse a través de las asignaturas, en especial aquellas que promueven las emociones y la creatividad; en ese orden de ideas, se plantea como objetivo del presente estudio, generar una Aproximación teórica del proceso de enseñanza – aprendizaje para la formación de valores en el en la asignatura de educación cultural y artística.
Materiales y métodos
Los elementos formales para la rigurosidad científica del trabajo se centraron en la aplicación de un diseño bibliográfico, cuya función es obtener material informativo donde se leen y clasifican los trabajos de interés del investigador mediante una macro búsqueda que permite la identificación de los documentos referentes al tema de investigación determinado por las estrategias de organización. (Gómez, et al., 2014).
Así mismo es tipo documental enfocada en analizar las diferentes fuentes para indagar sobre el tema e identificar las definiciones que permitan una aproximación teórica, para interiorizar y comprender el fenómeno que se estudia. (Rizo, 2015). En ese sentido, se recabo información mediante un arqueo de revisión de la literatura sobre el tópico temático, analizándola mediante la lectura, toma de apuntes e identificación de los aspectos de interés.
Hallazgos de la revisión documental
Respecto al tema de los valores, se advierte el aporte de muchos investigadores a nivel mundial, que, desde diferentes perspectivas, ya sea filosófica, psicológica o del desarrollo humano, han realizado aportes al tratar de explicar la manera de cómo en el ser humano va surgiendo el concepto de valor y la manera cómo se va estructurando un sistema de referencia que le facilite el desempeño a lo largo de su vida. Tomando como base el proceso de enseñanza – aprendizaje que es el que cimienta lo cognitivo, procedimental y actitudinal (axiológico). (López Sánchez, 2013).
Para ello, se toma en cuenta los vínculos entre educación, cultura y desarrollo mediante un sistema educativo en el que todos sus actores disfruten del derecho a ser educados, participando de espacios en los que se construya y transmitan los valores, competencias y actitudes culturales y de empoderamiento personal y social. (Alcántara, et al., 2018).
En primer lugar se hizo una revisión de algunas investigaciones científicas que indagaron sobre el tema de la formación en valores y con ello se da inicio al desarrollo del estado del arte del proceso de enseñanza y aprendizaje en la formación de valores:
A ese tenor, el trabajo de Cisneros (2018), denominado: Propuesta didáctica basada en el aprendizaje cooperativo para la formación en valores dirigida a estudiantes de Primer Año de Bachillerato de la Unidad Educativa Nuestra Señora del Rosario de la ciudad de Quito., plantea una propuesta centrada en el proceso de Aprendizaje para el desarrollo de valores, el mismo tiene como finalidad ofrecer una propuesta didáctica basada en el aprendizaje cooperativo, sustentada en la metodología del Paradigma Pedagógico Ignaciano (PPI), cuya fundamentación son los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola y que se desarrolla a través de las cinco etapas que lo componen. En lo esencial, se reafirma la necesidad de crear espacios y programas que sirvan de ayuda para fortalecer la formación de valores en los estudiantes, para la formación integral de los educandos, y en bajo ese basamento, se debe considerar la aplicación de estrategias didácticas que fomenten y fortalezcan el proceso de formación de valores durante el proceso enseñanza y aprendizaje.
De igual forma, el estudio de Chávez, et al (2018), titulado: Formación en valores en educación, busca ofrecer luces para ayudar al individuo que se está formando a fin de que tome las decisiones correctas en circunstancias conflictivas, en virtud de que cada día la sociedad demanda profesionales competentes y para nadie es un secreto la crisis de valores que viven los profesionales universitarios, por ello, es de vital importancia que los docentes estén preparados bajo el enfoque de valores asumiendo la misión que de convertirse en el modelo del alumno para que este aprenda a imitarlo, pues es esta la manera más eficaz de enseñar valores.
Por otra parte, los docentes deben tener claro que no solo están formando buenos profesionales desde el punto de vista del conocimiento, sino que también están formando seres humanos que impactaran en la solución de los problemas de una sociedad. La educación en valores no solo depende de los profesores es un trabajo en conjunto con las autoridades universitarias.
Se tiene también, la investigación de Suárez et al., (2019): Modelo para la formación de valores en la universidad inclusiva, donde los autores expresan que el tema de los valores se ha abordado en los últimos tiempos con un marcado interés, en consonancia con la sistemática profundización en la labor docente-educativa que se desarrolla en este nivel de enseñanza en el Ecuador. En la investigación se elaboró un modelo educativo para la formación de valores mediante con un enfoque inclusivo y humanista a fin de favorecer el desarrollo integral de los estudiantes. Para lograr este propósito, los autores articularon la metodología de la investigación científica mediante los enfoques cualitativos y cuantitativos.
Otra de las investigaciones revisadas fue la de Zapata (2021): El juego como estrategia didáctica para facilitar el aprendizaje de la Educación Cultural y Artística en adolescentes del subnivel superior de la Escuela “Alfonsina Storni”, donde se asume como línea de investigación Educación y Comunicación para el Desarrollo Humano y Social, como sub línea de investigación de Metodología medios, estrategias y ambientes de aprendizaje. Parte del problema que presenta la Educación Artística pese a ser esencial para el desarrollo cognitivo y su contribución a otras áreas, porque no tiene la atención necesaria en especial en el subnivel de Educación Básica Superior, donde se relega casi totalmente al juego siendo este una importante estrategia didáctica, omitiendo el carácter histórico-cultural arraigado a su práctica durante la existencia del ser humano en sus distintas etapas de vida.
En el mencionado trabajo, se plantea el desarrollo de una guía de juegos para la enseñanza de la Educación Cultura y Artística que contenga juegos acordes a las destrezas del subnivel de Educación Básica superior, que contribuya a la creatividad, trabajo colaborativo y practica de valores. Cada juego está acompañado del plan de clases y su respectiva evaluación, obteniendo de su aplicación resultados favorables en el aprendizaje; además aporta a la comprensión de la asignatura y su aplicación en el contexto del proceso educativo.
El estudio de Bonilla, et al., (2021): Los métodos disciplinarios aplicados por los docentes a los estudiantes de básica superior en la asignatura de Educación Cultural y Artística de la Unidad Educativa “COCAN”, parte del interés de estudiar las prácticas de los docentes ejecutadas durante la jornada pedagógica a los estudiantes de básica superior en la asignatura de educación cultural y artística, con el objetivo de determinar cómo influyen los métodos disciplinarios dentro del aula de clase. Tiene como propósito principal propiciar en los estudiantes el interés por vivir diferentes experiencias y les permite participar activamente en el aprendizaje destacando sus posibilidades para integrar actividades culturales y artísticas que sean aceptadas.
De todos estos trabajos, queda claro que el propósito en común de los investigadores es profundizar la práctica de valores desde la educación cultural y artística y a su vez promocionar el desarrollo de la inteligencia emocional, la percepción, lo intelectual, social y estético, y así poder brindar oportunidades que favorezcan a lograr diferentes objetivos de respeto y valoración del patrimonio cultural tangible intangible, propio y de otros pueblos además de razonar el papel que eximen los conocimientos y habilidades artístico en la vida personal y laboral en el desempeño de las diferentes profesiones.
Proceso de enseñanza aprendizaje
De acuerdo a (Hidalgo, 2018), el proceso de enseñanza – aprendizaje “es el conjunto de acciones y actividades generadas de manera planificada, en la que se involucra a estudiantes, docentes, espacio educativo y recursos educativos con el objetivo de alcanzar aprendizajes significativos” (p. 47), lo que quiere decir que su aplicación sirve como plataforma para que los docentes comuniquen o transfieran a os estudiantes la información que les permite obtener conocimientos.
Según Lizaraso y Paredes (2015), e, en el transcurso de enseñanza-aprendizaje, los alumnos de una institución educativa deben recibir los métodos de enseñanza para que los diferentes factores describan cómo el estudiante percibe, se relaciona e interactúa con la sociedad, de la misma forma que atiende indicadores para conocer el modo en el que es comprendido y aplicado el conocimiento.
En palabras de Escobar, et, al (2017), el desarrollo de enseñanza-aprendizaje abarca una renovación pedagógica debido a lo complejo que es el conocimiento que constantemente obliga a buscar nuevas leyes para el progreso de la humanidad de manera que se puedan aportar soluciones científicas que garanticen la eficiencia y eficacia de los procesos educativos donde el estudiante y el docente intervienen para intercambiar conocimientos, los cuales recurren con el apoyo de las nuevas tecnologías que se encuentran en expansión para así como las novedosas técnicas y estándares sólidos basados en la excelencia que les permita mejorar su formación.
Formación en Valores
Se entiende como el proceso de conformación y autoafirmación de la identidad del individuo desde una edad temprana, que promueve el comportamiento del hombre para conformar su personalidad y desarrollar su esencia como ser humano y activar la conciencia de internalización a fin de potenciar el pensamiento crítico; por ende la transformación de la sociedad. (Lamus y Chong, 2012).
Asimismo, (González. et,al, 2016), señala que la formación en valores, es la asimilación de actitudes, principios y normas morales que generan un comportamiento adecuado dentro del entorno social, demostrando un desarrollo en el aspecto personal. La acción de incluir la práctica de valores de una forma intencionada y consciente en el aprendizaje, no solo es pensar en habilidades y conocimientos, sino también en la relación que poseen estos con los significados de la realidad, alcanzada y dilucidada por todos de forma correcta en todas las culturas, sin distinción; es así que, el valor se interrelaciona con sentimientos y afectividades del individuo que se irradia a sí mismo y a los demás
En el ámbito educativo, los valores que se aspiran a alcanzar son los que se relacionan con la convivencia social humanizada, tienen que ver con una forma de vida en la que sea posible el crecimiento personal y de la sociedad en general; en otros términos la práctica de valores se dirige a favorecer el crecimiento personal, invitando a que se respeten y comprendan entre sí, para ejercer una armónica convivencia.
De acuerdo a Larios (2017), la educación en valores debe contribuir a varios aspectos, el primero, el plan de vida de las personas, pues pasa a ser un modelo basado en las orientaciones de la individualidad, y que dan el sentido fundamental a la existencia, entendido como el conjunto sistematizado de representaciones de posibles enfermedades de la mente, en base a los cuales se conciben “las actitudes y disposiciones teóricas del individuo, y que para ejercer un auténtico liderazgo de la personalidad, este modelo debe tomar una forma determinada en la actividad social del individuo y en sus relaciones con las personas” ( p.73). Dicho de otro modo, los valores se constituyen como una guía para la construcción de la personalidad, lo que determina el comportamiento del individuo en la sociedad.
Relación entre valores y comportamiento social
Según Ruiz. (2017). La relación entre valores y comportamiento social siempre van asociados a las buenas conductas, también conocidas como aquellas que son necesarias para la formación de las personas en la sociedad en un mundo donde la realidad es diversa, dinámica y cambiante. En efecto, los valores determinan el comportamiento hacia los individuos y regulan el funcionamiento social humano en forma subjetiva porque el hombre las hace propias y también objetivas porque la esencia de la sociedad las necesita; es decir, tienen estructura sistémica. Sin embargo, el conceptos de valor comienzan que decide asumir el individuo significa que el mismo elige los valores que regirán su comportamiento.
Los valores son construcciones individuales, generados a partir de gustos y comportamientos propios y particulares, ambos constituyen el sistema normativo social, que enmarca la transmisión de ellos a través de agentes socializadores, que en primera instancia debiera ser el seno del hogar, los responsables de la crianza, los padres y la familia donde se hace la reproducción cultural de los patrones de conducta para luego ser delineados por los docentes en la escuela. (Ruiz, 2017).
Valores en el sistema educativo
Debido a que el sistema educativo nacional promueve ciertos valores y exige la superación de contravalores, estos deben ser escenificados y desarrollados en las familias, ya que la institución y los padres son responsables de la educación para el desarrollo de los niños y adolescentes.
En lo legal predominan las pautas que constituyen referentes, así como: el enfoque de derechos que conduce al reconocimiento de sujetos; la convivencia como espacio donde se tejen relaciones sociales que forjan valores; el proyecto de vida que el alumno está llamado a desarrollar como persona, como ampliación de su libertad, autonomía y emancipación; los atributos de equidad e igualdad como esenciales en la nueva sociedad que se construye; la eliminación de todas las formas de discriminación y exclusión como imperativo para superar los contravalores; la consolidación de una cultura de armonía y la eliminación de la violencia; y finalmente, existir correctamente, como dimensión que se suma a la vida en comunidad y en sociedad (López, 2019).
Por otro lado, los objetivos de los procesos de educación en valores presentes en los programas del sistema educativo nacional y local que se orienta a "formar personalidades dialogantes, capaces de argumentar con las demás personas sus propias razones, de escuchar y de evaluar a los demás. Buscar bases de acuerdos en proyectos racionales y comunes, respetando los principios básicos de una convivencia justa”. (Escobar, 2019). Por lo que se infiere, que los a través de la formación en valores se contribuye con el desarrollo cognitivo y psicoemocional del individuo.
Estos propósitos, además de las actividades que se realizan en la institución educativa, necesitan ser reforzados con procesos similares en las familias, para que finalmente, en la vida social, sea más ejecutable compartir valores que son una base fundamental de la vida democrática, el respeto a la vida, las normas y el poder resolver los conflictos que siempre existen.
Las propias familias, a través de investigaciones, remarcan la necesidad de promover valores a sus hijos y solicitan a las instituciones educativas su apoyo para poder cumplir con estos objetivos. Parten de la inquietud de la personalidad de sus hijos se pueda configurar a través de signos y referencias que no pueden afrontar ni resolver, como el consumo de drogas, el consumismo, la brecha generacional, la violencia, el impacto de las tecnologías de la comunicación, entre otros. (MINEDUC, ECA Currículo, 2016).
Los valores como eje trasversal
Los valores deben ser parte del programa de planificación diaria, ya que los estudiantes deben estar preparados para aprender, cambiar situaciones y reaccionar de alguna manera a la situación de aprendizaje. La forma en que esto se logra es mediante la inmersión total en el campo de los valores, en todo lo que se hace, ya sea en casa o en la escuela, los valores de la educación en todos los ámbitos del aprendizaje son fundamentales. Aunque no siempre es así, porque no hay preparación o por falta de experiencia, pero se debe pensar que el proceso educativo no está separado del desarrollo de capacidades.
Desde la educación, todos los procesos y el aprendizaje de conocimientos y valores son la base de toda modificación social en la vida de los seres humanos. En ese sentido, “Los ejes transversales constituyen los pilares sobre los que los demás campos renuncian a presentar un mayor sentido pedagógico” (MinCultura, 1995). En términos de educativos, los valores proveen la esencia de las actuaciones y los comportamientos en los que se fundamenta el proceso formativo.
Particularmente, el programa de educación cultural y artística ofrece, de forma clara y flexible, metas, temáticas y contenidos que son competencias con criterios de actuación, que prometen amplias posibilidades para desarrollar una misma competencia, conseguir determinados conocimientos o desarrollar actitudes y plantear distintas formas de organización del contenido en la clase de arte. Por ello, los profesores de cada institución educativa deben planificar las unidades didácticas, ofrecer actividades con planificaciones metodológicas basadas en proyectos para la asignatura de educación cultural y artística, desde el primer año de educación básica hasta el segundo año de Bachillerato. (MINEDUC, ECA Currículo, 2016).
Educación Cultural y Artística
El área de Educación Cultural y Artística se entiende como un lugar que apoya el conocimiento y la participación en la cultura y el arte actual, en constante diálogo con expresiones culturales locales y ancestrales, promoviendo el disfrute y el respeto por la diversidad de costumbres y formas de expresión.
A su vez, se construye a partir de una sucesión de supuestos que se han de tomar en cuenta para la interpretación de los distintos elementos del currículo, es decir, los objetivos, destrezas con criterios de desempeño y estándares de aprendizaje que, en su conjunto, definen la Educación Cultural y Artística como un área:
· Basada en el trabajo por proyectos que integran distintos aspectos y disciplinas de las artes y la cultura (música, cine, artes visuales, teatro, danza, fotografía, gastronomía, lengua, creencias, artesanía, entre otros).
· Centrada en la vida cultural y artística contemporánea
· Atenta a la cultura del entorno próximo, pero también a las hibridaciones propias de un mundo globalizado y las opciones que proporciona el arte comunitario.
· Vinculada a aprendizajes de otras áreas, a las que puede contribuir a través del diseño y desarrollo de proyectos específicos
· Pendiente de las capacidades expresivas y los saberes que los estudiantes adquieren fuera de la escuela y aportan en el momento de su escolarización.
· Caracterizada por la acción y la participación.
· Facilitadora de espacios para la expresión, la creatividad y el desarrollo emocional.
· Capaz de revalorizar los saberes culturales y artísticos ancestrales, propios de cada región del país, como recurso s a través de los cuales reconoce y respeta la diversidad cultural del patrimonio, contribuyendo a su conservación y renovación. (Educación M. d., 2018).
· Generadora de espacios de inclusión que contribuyen al desarrollo armónico e integral de los estudiantes.
Con lo antes mencionado se puede evidenciar las bondades del currículo del área de Educación Cultural y Artística está orientada a fortalecer la educación con visión integral. En la actualidad el currículo nacional está planteado por subniveles y para la implementación del mismo es necesario que cada institución educativa lo situé según sus necesidades por medio de los instrumentos de planificación meso curricular: Planificación Curricular Anual (PCA) y Planificación Curricular Institucional (PCI).
Bases Jurídicas que sustentan el estudio de valores en educación
La constitución de la Republica de Ecuador (2008), destaca jerárquicamente una serie de valores que enmarcan el ordenamiento de la estructura jurídica relacionada con la justicia, la igualdad y el pluralismo según lo manifestado en el artículo 1, que principalmente despliega un escenario para que los ciudadanos desarrollen el Buen Vivir mediante su convivencia con los demás que es vinculante al comportamiento por el que se deben regir los ciudadanos.
Por otra parte, La Ley Orgánica de Educación Intercultural, (LOEI, 2011), señala en el numeral 4, del Artículo 90, que uno de los preceptos de la educación es la “consolidación de una política institucional educativa de convivencia basada en derechos, valores, disciplina, razonabilidad, justicia, pluralismo, solidaridad y relación intercultural”. Este mandato expreso de ley, debe cumplirse en todos los niveles del sistema educativo para que con la aprehensión de valores se puedan formar buenas personas.
Igualmente el Reglamento a la LOEI (2022), en su artículo 10 refiere: “… “Las Instituciones educativas pueden realizar propuestas innovadoras y presentar proyectos tendientes al mejoramiento de la calidad de la educación, siempre que tengan como base el Currículo Nacional…” (MINEDUC, LOEI, 2017). De allí que el estudio de valores se pueda abordar partiendo de trabajos de titulación que a bien tengan desarrollar los investigadores que viven la realidad en torno a este tema.
La formación en valores a través de la educación artística como base del desarrollo humano
Los centros educativos fueron creados inicialmente para adquirir información, práctica en la oratoria y en la escritura, hoy en día la educación busca formar sujetos desde, en y para la diversidad, desarrollando habilidades, destrezas, competencias, descubriendo talento, con la generación de ciudadanos con valores, comprometidos y responsables ante la sociedad.
Visto de esta forma, se resalta la importancia de la educación como base del desarrollo humano concebido como un aspecto que permite al sujeto desarrollarse en los diferentes campos en el que se relaciona, favoreciendo la posibilidad de contar con múltiples oportunidades de acceder al disfrute de una vida en condiciones saludables y de forma prolongada además de obtener conocimientos y todo lo necesario para alcanzar una vida con dignidad, centrado en el sujeto desde la perspectiva la necesidades de formar seres libres que hace del docente un facilitador de nuevas prácticas didácticas en el área de la Educación Artística.
Todo ello, contribuye a la construcción de un tejido social fuerte, que permita procesos de desarrollo humano en donde exista libertad para el hombre, también se requiere del cumplimiento del papel importante que desempeña la escuela como institución en las cuales se reconozca ambientes propicios para el dialogo y se valoren costumbres y tradiciones basadas en la libertad.
A pesar de que aún existen en las aulas docentes tradicionales, que depositan en sus estudiantes una cantidad de información sin tener en cuenta las condiciones, los conocimientos previos, necesidades, intereses, diversidad, realidad; es importante que se generen movimientos o acciones que apunten a mejorar las prácticas educativas en la escuela actual, que sean más dinámicas, lúdicas, desde la realidad y con sentido para los educandos, con práctica de valores. (Molina, 2016).
Cabe considerar, que desde la reflexión pedagógica se pueden transformar las prácticas docentes de concepciones de una educación conductista a una educación activa-participativa en el sentido de organizar los planes de aula con miras a unas alternativas didácticas para fortalecer la formación y práctica de valores que tan necesarios son en la sociedad actual, lo cual puede lograrse con el desarrollo de las capacidades sensitivas mediante la educación artística en conexión con los valores transversalmente.
En habidas cuentas, el hombre optimiza sus percepciones e intuiciones agudizando sus sentidos para conocer sensiblemente el mundo, mejorando así las relaciones estéticas del él consigo mismo, con el medio y con los demás. En consecuencia, se reconoce que una de las funciones de la educación básica es que el niño comprenda el mundo y se prepare para vivir en ese mundo, por cuento el mayor valor de la educación en general, se asume como la capacidad más valiosa y en ese sentido, la educación artística ayuda a formar con esta finalidad. (Gutiérrez, 2009).
Notablemente, con el arte se desarrollan capacidades cognitivas lógico-verbales al conceptuar, razonar, valorar y enjuiciar estéticamente los trabajos artísticos propios y ajenos. También, se reflexiona en torno a los hechos y cosas de la realidad circundante que han de inspirar la obra del estudiante, estos hechos pueden ser dados como temas en la clase de Educación Artística.
A ese tenor, la capacidad creativa que la práctica artística favorece en los hombres, tal vez sea la más reconocida de todas, en algunos casos la única que se valora. Esta capacidad se debe aprovechar en la Educación Artística como una manera de articular las capacidades sensitivas y cognitivas para responder, originalmente, con innovación artística individual a las dificultades sociales y naturales del entorno real. También se reconoce el arte como una actividad donde se usa ampliamente el pensamiento lateral y el hemisferio derecho del cerebro.
Lamentablemente, las capacidades expresivas del hombre actual están muy menguadas, este es un mundo donde prima el individualismo y el egoísmo; así se vive una realidad con unas relaciones interpersonales cada vez más tecnificadas y menos humanas, pero se considera que con la Educación Artística se promueve el uso de las artes como medio para comunicar las ideas y sentimientos propios, en palabras, con el cuerpo, o con obras, optimizando el modo en que se dan las relaciones entre los hombres al diversificar los medios de expresión.
Conclusión
Los lineamientos para la Educación Cultural y Artística, explican la importancia del arte y la estética para el desarrollo personal, así como la metodología de los proyectos artísticos en el aula, la evaluación y aplicación de técnicas y herramientas para evaluar el desarrollo de aprendizaje individual de cada estudiante en esta asignatura, está configurada para niveles elemental y avanzado.
Por tal motivo, la Asignatura garantiza el aprendizaje desde temprana edad y está construido en torno a tres dimensiones: personal y afectiva-emocional (el yo: la identidad); social y relacional (el encuentro con otros: la alteridad); y simbólica y cognitiva (el entorno: espacio, tiempo y objetos), las cuales estructuran procesos para el aprendizaje del arte plástico, la música y la expresión corporal. Para el desarrollo de esta área es necesario que la implementación del documento curricular que se presenta cuente con la colaboración del profesorado experto (profesores de música y plástica) para planificar proyectos interdisciplinares que produzcan un aprendizaje más significativo, propiciando un contacto más cercano con el arte en sus diferentes manifestaciones para optimizar la enseñanza de esta disciplina desde un enfoque netamente contemporáneo. (MINEDUC, 2016)
En este espacio de desarrollo personal y aprendizaje, los estudiantes se acercan al entendimiento del lado estético de la vida a través de varios lenguajes artísticos como las artes visuales, la música, la expresión corporal, el cómic, el teatro, la artesanía, la escultura, la pintura. Observando, experimentando, investigando, creando, expresando, explorando y viviendo juntos para la conexión con el arte y la cultura. Situado al entorno y al grupo de estudiantes con el fin de generar relaciones de aprendizaje, conciencia, expresión artística y apreciación del arte a través de los componentes curriculares.
De allí que el proceso de enseñanza y aprendizaje que se fundamente en la promoción de los valores mediante las artes y la cultura perfecciona al individuo, alienta la imaginación y la innovación y ofrece experiencias únicas que se mantienen en el tiempo. Por tal motivo, la educación cultural y artística debe comprenderse no solo en su singularidad como campo y en su relación con otras áreas, sino también en su conexión con la vida.
Referencias
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